Pues resulta que estamos viviendo sin darnos cuenta con unos nuevos amiguitos, sobretodo los mininos que son los que más "confianza" tienen con ellos. Y estos nuevos amiguitos se llaman....ACAROS! Raspa los trajo alojados en sua orejitas cuando llegó a casa; el veterinario no se dió cuenta cuando le hizo la revisión y ahora resulta que los tres felinos tienen las orejitas llenas de estos pequeños bichitos.
Ayer Neo movía mucho la cabeza, se rascaba las orejas y Sue lo llevó al veterinario porque le vio las orejitas con unas costritas negras y pensó que sería una otitis. Cuando llegó allí el veterinario le cogió una muestra para analizarla con el microscopio y confirmó sus sospechas: ácaros. El pobre Neo lo pasó fatal con la visita., no paraba de maullar.
Ahora les toca, a los pobres, estar 6 meses echandose unas gotitas en los oidos para deshacerse de esos molestos inquilinos, jejeje. A ver que tal se portan cuando Sue intente ponerles las gotas, porque a mi me gusta muy poquito que me toquen las orejas.
Menos mal que Toni(el veterinario) le ha dicho a Sue que no se les puede contagiar ni a ellos ni a Cova y Blankita, sino vaya cuadro se montaría, jejeje.
Ayer Neo movía mucho la cabeza, se rascaba las orejas y Sue lo llevó al veterinario porque le vio las orejitas con unas costritas negras y pensó que sería una otitis. Cuando llegó allí el veterinario le cogió una muestra para analizarla con el microscopio y confirmó sus sospechas: ácaros. El pobre Neo lo pasó fatal con la visita., no paraba de maullar.
Ahora les toca, a los pobres, estar 6 meses echandose unas gotitas en los oidos para deshacerse de esos molestos inquilinos, jejeje. A ver que tal se portan cuando Sue intente ponerles las gotas, porque a mi me gusta muy poquito que me toquen las orejas.
Menos mal que Toni(el veterinario) le ha dicho a Sue que no se les puede contagiar ni a ellos ni a Cova y Blankita, sino vaya cuadro se montaría, jejeje.